Además de la nutrida programación académica y cultural desarrollada en la Biblioteca Héctor Salah Zuleta y en la zona verde del Centro de Convenciones Anas Mai, la ciudad de Riohacha fue escenario de una serie de eventos alternos que destacaron por su impacto social, educativo, cultural y de salud, todos enfocados en atender y dignificar la vida de la población migrante.
En la Institución Educativa Divina Pastora, la Secretaría de Educación lideró la Feria de Lectura, Escritura y Oralidad por un Distrito Especial, Turístico y Cultural sin Fronteras, un espacio de formación y encuentro que reunió a docentes, estudiantes, padres de familia y comunidad en general.
De manera paralela, en el Auditorio Romualdo Brito del Liceo Padilla se desarrolló la Feria de Salud, donde aproximadamente 300 habitantes migrantes y colombianos recibieron atención médica, vacunación y valoración de talla y peso para menores de edad, gracias al trabajo articulado de las IPS del Distrito y el Plan de Intervenciones Colectivas (PIC).
Asimismo, el Centro Intégrate, a través del Ministerio del Interior, realizó su Feria de Servicios, logrando atender a cerca de 500 personas con toda la oferta institucional, incluyendo trámites de SISBEN, aseguramiento en salud y otros programas diseñados para garantizar derechos fundamentales a la población migrante.
Por su parte, en el Parque Padilla se inauguró la Galería Urbana “Historias que Migran”, una exposición fotográfica que recoge la visión de fotógrafos y ciudadanos sobre el fenómeno migratorio. La muestra, visitada por cerca de 30 delegados internacionales del foro, permanecerá abierta hasta el próximo 16 de septiembre, para que los riohacheros puedan recorrerla y reflexionar sobre las historias que allí se cuentan.
De esta manera, Riohacha no solo es sede de los debates y reflexiones del Foro de Migración y Desarrollo, sino también de una agenda alterna que impactó de manera directa en la vida de cientos de migrantes, promoviendo inclusión, acceso a derechos y reconocimiento cultural.
