Las autoridades judiciales legalizaron la captura de Ricardo José González Torres, de 33 años de edad, de nacionalidad venezolana, sindicado por la Fiscalía como uno de los presuntos asesinos del profesor de Ciencias Sociales del Instituto La Esperanza de Valledupar, Eliécer Guevara Rojas, de 54 años natural de Manaure, Cesar, en los hechos ocurridos la madrugada del domingo en el lugar de residencia del docente en el barrio La Floresta de Valledupar.
González Torres, quien al parecer se dedicaba a la tarea de oficios varios es oriundo del estado Zulia, Venezuela, quien se encontraba residenciado en el barrio los Fundadores la capital de Cesar, fue señalado por un testigo de los hechos, por lo que fue capturado y sindicado como coautor de homicidio agravado y tentativa de hurto calificado agravado.
El pasado lunes en horas de la tarde se llevaron a cabo las audiencias concentradas de legalización de captura, imputación de cargos e imposición de medida de aseguramiento, y la Fiscalía Séptima Local le imputó cargos ante el Juzgado 12 Penal Municipal, los cuales no aceptó, la Fiscalía solicito privación de la libertad para el capturado por significar un peligro para la sociedad.
En este suceso lamentable se pudo conocer que hubo la participacion de dos venezolanos Como se recordará, el cadáver del docente , fue encontrado dentro de una de las habitaciones de la vivienda desnudo, amarrado de manos y pies y amordazado con un trapo en la boca, que sería el causante de la asfixia que causó la muerte al educador.
De acuerdo a lo manifestado por el testigo al ente acusador, Eliécer Guevara Rojas estaba departiendo con unos amigos la noche del sábado en su vivienda donde residía solo, hasta ese sitio llegaron dos hombres de nacionalidad venezolana, a quienes invitó a pasar a la casa y compartió con ellos sin problemas. Un tiempo después el docente subió con uno de ellos a una habitación y al testigo le extrañó porque pasaba el tiempo y no salían. Por ello, decidió subir hasta el cuarto y se encontró con la terrible escena.
De inmediato el presunto homicida lo sometió con un arma blanca y lo amarró para evitar que saliera en busca de ayuda y poder seguir con su plan de robar las pertenencias del profesor, pero con el acto de amordazamiento terminó causando la muerte al docente.
