Edicion febrero 15, 2025
CUBRIMOS TODA LA GUAJIRA
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Pastor ICBF Riohacha - Robinson Mejía Iguarán
Pastor ICBF Riohacha – Robinson Mejía Iguarán

1. “Ciertamente me he dado de corazón a todas estas cosas, para poder declarar que los justos y los sabios, y sus obras, están en la mano de Dios. Y que los hombres ni siquiera saben qué es amor o qué es odio, aunque todo está delante de ellos”. Eclesiastés 9.

Tanto el justo como el impío, todos se encuentran bajo la soberanía de Dios. No hay hombre que pueda librarse de su soberanía. Nadie conoce su futuro. Dios es el Único Todopoderoso, que conoce las obras y el juicio de cada uno de los hombres. A todos les llega la muerte, así como el día en que comparecerán ante el tribunal de Dios. Los impíos persisten en ejecutar el mal y al final, experimentarán la muerte eterna.

Pero los que todavía están con vida, saben que han de morir; por lo que atesoran su vida y tienen la oportunidad de obtener la vida eterna mediante Jesucristo. Sin embargo, ya no hay ninguna esperanza para los que están muertos. Por tanto, mejor es vivir aunque fuera en medio de la miseria, que estar muerto.

Los cristianos disfrutamos de las cosas que Dios nos da. Y somos felices porque comemos y bebemos de las cosas que Dios nos da por gracia, y celebramos con gozo. Es una bendición de Dios poder amar y vivir felizmente con el cónyuge que Dios nos ha dado. Es hermoso y maravilloso poder pasar toda una vida con una sola mujer, y no con varias.

La felicidad consiste en esencia, valorar a la familia, alejarse de la fornicación, y apartarse en pureza y santidad. Si en verdad queremos disfrutar de la vida, debemos dar lo mejor en nuestro trabajo. Porque una vez que estemos muertos, ya no vamos a poder trabajar aunque quisiéramos. El que da lo mejor de sí para cumplir con su labor, experimenta una felicidad tal que los que se conforman con poco, nunca podrán hacerlo.

Si bien todos seremos juzgados, el resultado dependerá de sí estamos o no en manos de Dios. La vida que se aparta de Él, perecerá porque se olvidó de Dios (Salmos 73:27). Por eso, lo que deben preparar quienes saben acerca del juicio es la fe sobre la salvación.

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Quienes recibieron a Jesucristo con la fe de salvación, iniciaron una nueva vida en las manos de Dios la cual les agrada. Como comprenden que esa vida les fue dada por el Creador, viven cada día llenos de alegría, gozo, honestidad, esmero y fidelidad.
Quien pone su vida en manos de Dios vive alegre, agradecido y contento. TODO ESTÁ EN MANOS DE DIOS.

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