¿QUIÉN ES EL VERDADERO JUEZ?

11. Jesús, pues, estaba en pie, delante del gobernador; y éste le preguntó, diciendo: “¿Eres tú el Rey de los judíos? “Jesús le dijo: “Tú lo dices”. Mateo 27.
Jesús sostiene su inocencia en el interrogatorio de Pilato, guardando silencio. Solamente responde a una pregunta: “¿Eres tú el Rey de los judíos?”; y Él declara la verdad diciendo: “Tú lo dices”. Si bien en estos momentos se encuentra solo compareciendo a un tribunal, Él es el Mesías que ha venido como Rey. Los líderes religiosos le acusan injustamente de muchas cosas, pero Él guarda silencio. No abre su boca para obedecer la voluntad del Padre de salvar a la humanidad.
Pilato desea indultar a Jesús, conforme a la tradición de soltar a un preso en el día de la fiesta. Barrabás es un ladrón, que ha cometido homicidios y otros actos delictivos y revolucionarios para alcanzar la independencia de Judea. Y el pueblo decide salvar a este criminal, pidiendo la cruz para Jesús. Él ha venido como la luz de la verdad, pero el mundo no le conoce y le rechaza (Jn. 1:9-11).
Toda decisión conlleva una responsabilidad. Temiendo un posible alboroto en el pueblo si no atiende la petición de los líderes religiosos y de la multitud, finalmente Pilato suelta a Barrabás y entrega a Jesús para ser crucificado. Ha primado el poder político del que goza, antes que en la justicia y en la bondad para tomar tal decisión. Declara ser inocente en este juicio y se lava sus manos delante de la multitud.
Así trata de huir de sus responsabilidades, aunque sin éxito. Porque cada vez que un cristiano-católico recita el Credo Apostólico, se menciona a Pilato como el responsable final de la muerte de Jesús. Por otro lado, los judíos que llevaron a la muerte del Hijo de Dios debido a su ignorancia espiritual, tuvieron que pagar el precio bien caro a lo largo de la historia. Pero en medio de todo esto, Jesús obedece sin quejas ni murmuración a esta decisión sumamente injusta, para cumplir enteramente la voluntad de Dios. Dios les guarde.
Jesús no culpa ni odia a quienes lo persiguen, aunque sea el caso más injusto. Proclama la verdad deseando que todo el mundo la conozca sin siquiera defenderse. Además, recorre el camino de la cruz que tiene delante de sí para salvar a la humanidad. Es necesario saber quién es el verdadero juez en este mundo lleno de injusticias para poder permanecer con firmeza del lado de la verdad. Dios les guarde.