
En el corazón de La Guajira, donde el sol y el viento no descansan, una infraestructura silenciosa pero poderosa se levanta para cambiar la historia energética de Colombia. El proyecto Cuestecitas–Copey–Fundación a 500/220 mil voltios no es solo un hito de ingeniería. Es una declaración de voluntad, una prueba tangible de que la transición energética no se promete: se construye.
En un país donde las grandes obras a menudo se enfrentan a retrasos, críticas y escepticismo, este proyecto es un ejemplo de ejecución con propósito. A pocos días de su entrega oficial, ver al equipo de ISA INTERCOLOMBIA afinar los últimos detalles con rigor técnico y orgullo humano, envía un mensaje poderoso: la energía limpia no es un sueño lejano, es una realidad que se enciende paso a paso.
Este tipo de proyectos conectan más que voltajes. Conectan regiones históricamente marginadas al desarrollo, como La Guajira, con el centro del país. Conectan desafíos técnicos con aprendizajes colectivos. Conectan las palabras con los hechos.

La reciente energización de equipos de 220 mil voltios y las pruebas exitosas a transformadores de potencia no son meros hitos técnicos. Son señales de que Colombia está madurando su apuesta por una infraestructura moderna, resiliente y, sobre todo, sostenible. Porque sí: cada kilovoltio que circule por estas líneas será una ruta directa para que la energía limpia llegue más lejos y con mayor estabilidad.
La transición energética no debe ser un tema de moda, sino una política de Estado. Y este proyecto, más que una obra, es una base sólida para que el país acelere ese proceso con responsabilidad. Ya no se trata solo de generar energías renovables: se trata de garantizar que haya caminos como esta línea de transmisión para llevar esa energía a quienes más la necesitan.
Hoy, La Guajira no solo aporta su territorio y su riqueza natural a esta causa. También aporta una lección: cuando hay compromiso técnico, visión colectiva y convicción humana, el desarrollo sí es posible. Y lo más importante: puede ser justo, sostenible y transformador.