Edicion noviembre 14, 2025
CUBRIMOS TODA LA GUAJIRA
ESTE ES EL PODER DE DIOS
Publicidad

Comparte

Pastor ICBF Riohacha - Robinson Mejía Iguarán
Pastor ICBF Riohacha – Robinson Mejía Iguarán

19. Entonces los hechiceros dijeron al faraón: “Es el dedo de Dios”. Pero el corazón del faraón se endureció, y no los escuchó, tal como Jehová lo había dicho.

Éxodo 8.

El pecado cometido a sabiendas es más grave que el involuntario. Es difícil que una persona, que ha conocido a Dios y luego se corrompe, vuelva al Señor. Hasta ahora, Dios había anunciado la plaga que vendría, aunque el faraón se negaba a oír. Pero, la tercera plaga se dio sin aviso. Por medio de Moisés, Dios ordenó a Aarón golpear el polvo de la tierra con la vara, el cual se convirtió en piojos que llenaron la tierra.

Publicidad

El faraón había visto cómo las ranas habían muerto por la oración, pero decidió oponerse a la voluntad de Dios. Dios envió una plaga usando el polvo de la tierra, y no el agua como las veces anteriores. Los egipcios se consideraban muy dignos ciudadanos, pero tuvieron que quitarse la ropa para matar piojos, pese a la vergüenza. Dios enaltece a los que lo exaltan con humildad, y humilla a los soberbios que lo menosprecian.

Dios protege de una manera especial al pueblo que Él ha escogido. En la plaga de moscas Dios hizo una distinción entre la región de Gosén y el resto de Egipto. El pueblo de Israel habitaba en Gosén. Como el faraón no dejaba ir a Israel, Dios envió toda clase de moscas al palacio y a todo Egipto, excepto la tierra de Gosén, donde moraba Su pueblo.

Dios escogió a Israel de entre todos los pueblos del mundo, los amó y guardó como a la niña de sus ojos. El pueblo de Dios no está exento de las dificultades del mundo. La diferencia es que para los incrédulos, el sufrimiento significa juicio por su desobediencia; pero para los cristianos, es entrenamiento para la madurez. No existe ninguna prueba que los creyentes no podamos soportar, porque sabemos que con ellas, Dios también nos da la salida.

Todos los días, los periódicos y otros medios de comunicación informan sobre historias de éxitos milagrosos de personas y hasta se publican libros sobre ellos, lo cual produce sentimientos de celos e inferioridad en otros. Tenemos que recordar que la única razón de cada milagro es Dios. También debemos recordar que Dios está detrás de cada desastre. Es mediante aquellos desastres y sufrimientos que Dios nos advierte y comparte el mensaje del evangelio. Pero los que se oponen a Dios no quieren reconocer Su sabiduría.

En vez de concentrarse en la dignidad y grandeza de Dios, su inferioridad los hace explotar de rabia. Sus corazones están dominados por Satanás, ya perdieron la paz y se volvieron ciegos a la verdad. El faraón de Egipto y sus hechiceros tenían corazones endurecidos ante los milagros que Moisés les demostró y lo confrontaban. El hecho de que ellos confrontaron a Moisés, demuestra que negaban a Dios y se negaban a reconocerlo. Debemos basarnos en la Palabra de Dios y Su sabiduría para llegar a conocerlo más profundamente. Con un corazón sincero y acciones honestas, debemos fortalecer nuestra fe en Dios.

Las calamidades que Dios permite manifiestan Su poder ante todo el mundo. Dios les guarde.

Publicidad

úLTIMAS NOTICIAS

Noticias Más Leídas

Publicidad
Publicidad