Como si fuera un sino trágico, el desenlace fatal de un aparatoso accidente de carretera, entre Manaure y Riohacha, cobró la vida de los hermanos Miguel Andrés y Lenny Pitre Ruiz, enlutando una vez más el hogar de sus padres Miguel y Mireya, cuando aún no se reponen de la desgracia que significó para ellos la temprana desaparición de su hija Leana.
Conturba nuestro espíritu esta infausta noticia, debatiéndonos entre la consternación y el desconcierto, sobre todo por la cercanía, la amistad y más que esta la estrecha relación que tuvimos con nuestro ahijado Miguel Andrés.
Este padrinazgo nuestro nació de la proximidad y el entrañable vinculo que se forjó entre él y nosotros, a quienes además de respeto profesaba un gran cariño e indisimulable admiración.
Ello nos llevó, primero a mí, a vincularlo a mi Despacho en el Ministerio de Minas y Energía, siendo esta una de sus primeras oportunidades en el ejercicio de su profesión de abogado. Y posteriormente mi señora Nydia propició su vinculación para que asumiera como Magistrado auxiliar de la Magistrada del Consejo de Estado Ruth Stella Correa quien luego se lo llevó como asesor de su Despacho cuando se desempeñó como Ministra de Justicia.
Siempre hemos dicho que el éxito en la vida es un cruce de caminos entre la oportunidad y la preparación y si algo caracterizó a Miguel Andrés, además de su inteligencia y probidad, fue su preparación, por eso fue una persona que alcanzó el éxito a muy corta edad. Y no es para menos, él no se contentó con el título de abogado, se especializó en Derecho administrativo, obtuvo un Magister en responsabilidad contractual y extracontractual y del Estado, hasta doctorarse en Derecho de su Universidad Externado de Colombia. Desde sus inicios se mostró como un hombre talentoso, al graduarse de Bachiller como el mejor ICFES del Colegio La Divina Pastora en 2001!
El bicho de la política le picó, llevándolo a aspirar fugazmente pero sin éxito a la Cámara de Representantes, animado por el afán de servirle a La Guajira, a Dibulla, su tierra natal, porque si algo lo caracterizo a él, además de su empatía personal, fue su altruismo. El mismo que lo llevó a acompañar al actual Gobernador Jairo Aguilar Deluque y a este a depositar en él toda su confianza, primero en la campaña que lo llevó hasta el Palacio de la Marina y posteriormente como su colaborador de cabecera en su Despacho. Nunca perdimos el contacto con él, era mi puente con el señor Gobernador, siempre que teníamos inquietudes y sugerencias para que se las transmitiera. Su 2 experiencia como Secretario de Gobierno de Riohacha le fue muy útil para su nuevo reto!
La Guajira y sobre todo la juventud de relevo de su dirigencia ha perdido uno de sus líderes más promisorios, más brillantes y más comprometidos con los más vulnerables. El mejor homenaje que se le puede rendir es que las nuevas generaciones sigan su ejemplo y recojan su legado. Con su deceso se congeló esa sonrisa afable que siempre tenía a flor de labios: nos va a hacer mucha falta.
Deja para la posteridad la meritoria Tesis que presentó para optar su grado de Doctor en Derecho en nuestra Universidad Externado titulado “El daño social: un concepto inexplorado en el ordenamiento jurídico colombiano, un análisis enmarcado en la exploración y explotación de energía (gas, carbón y energía eólica) en comunidades étnicas (Wayüu) del Departamento de La Guajira”. La misma que le mereció la calificación de Sobresaliente Cum Laude.
También tuvo para él un concepto muy elogioso el profesor Alberto Montaña, como Director de su Tesis, para quien “es una Tesis en derecho de la responsabilidad desde una perspectiva distinta, arriesgada, porque lo que nos dice es que desde la perspectiva de la reparación integral del daño hay algo que no se está reparando cuando se causan unos daños sociales muy específicos a unas comunidades indígenas distintos a los daños ambientales¨.
Y fue la propia Universidad la que se pronunció en los siguientes términos: “para la Universidad Externado de Colombia y para el programa de Doctorado en Derecho es motivo de satisfacción el logro obtenido por nuestro estudiante”! A sus padres queremos decirles que compartimos su dolor, los comprendemos, porque como dijo el Papa Francisco “sobrevivir a los propios hijos tiene algo particularmente angustioso, que contradice la naturaleza elemental de la relación que da sentido a la misma familia”. Pero también tuvo palabras de consuelo el Papa Francisco, cuando nos recuerda que “la muerte no tiene la última palabra: esto es un verdadero acto de fe” y ello en razón de que para los cristianos quien cree en Dios no morirá para siempre, por el contrario vivirá para siempre. Hacemos extensivas nuestras condolencias a su hija Ashia Valentina Pitre Ricciulli, a sus hermanos y demás familiares.
