“Quise venir hasta tu casa para hablar contigo a través de esta carta. Me hubiera encantado estar personalmente, pero en vista del tiempo y de que tenía que hablar contigo urgentemente, decidí escribirte esta carta y traerla hasta tu puerta para decirte dos cosas:
La primera, es para decirte “¡GRACIAS!”
Sí, debo darte las gracias porque gracias a tu apoyo, y al de cientos de miles de riohacheros, la encuesta más importante realizada en nuestra ciudad nos reconoció como la campaña número uno en intención de voto y como la única campaña que crece, crece y sigue creciendo desde el primer día.
¡¡Tenemos el apoyo del 39% de la ciudad, aumentando aún más nuestra ventaja sobre las otras campañas!!
¡Gracias a Dios y a ti por esta noticia tan maravillosa!
La segunda cosa que quería venir a decirte es que así como con esta carta ha llegado hasta tu casa, yo mismo, como alcalde, también llegaré con generación de empleo, capital semillla para que puedas crear tu propio negocio familiar y aumentar tus ingresos. Pero ademas, también vendré a traerte educación, salud y seguridad.
Sí, te prometo que lo haré. Aquí estaré para ti. Como alcalde, prometo venir hasta tu barrio y buscarte para agradecer todo el apoyo que me has dado, no sólo desde ahora, sino desde siempre; porque tú fuiste uno de esos que cuando me vio en las calles haciendo esta campaña humilde, dijo “¡qué bueno que un médico de la gente, que siempre ha trabajado por la comunidad así no esté en campaña, Gracias por tu apoyo, una vez más.
Vine hasta tu casa para decirte que aquí estaré para ti.
Todas las encuestas dicen que vamos por el camino del triunfo, pero necesitamos de tu voto y el de tu familia. Tú has visto mi campaña y así será mi forma de gobernar: sin ataques, con propuestas y, ante todo, trabajando con la gente.
De nuevo, discúlpame por llegar así hasta tu casa: pero venía a agradecerte y a decirte que tu voto por mí no será en vano: tu voto consolidará nuestro triunfo y, sobre todo, permitirá que tú, tu familia y toda Riohacha pueda avanzar más.
Genaro Redondo
Tu alcalde, pero ante todo, un amigo más