Por: Francheska Gómez, Escuela de Comunicaciones del Pueblo Wayuu Jayariyú Farías Montiel
Los días 11 y 12 de enero, la comunidad Koushalain-Waimpiralen, ubicada en el territorio de Jalalaa, llevó a cabo un significativo encuentro familiar en el que las generaciones del linaje Ipuana se reunieron para desarrollar un plan de resiliencia frente a la crisis climática que afecta a su región.
Durante el encuentro, se realizaron conversatorios en un círculo de palabra alrededor de una fogata, donde mayores, autoridades y jóvenes compartieron experiencias y reflexiones sobre las prácticas ancestrales y el origen del mundo según la cosmovisión wayuu.
Se discutió cómo las antepasadas llegaron a habitar el territorio de Waimpiralen y se abordaron los desafíos actuales, como la escasez de agua y las sequías prolongadas, que han impactado negativamente la alimentación de la comunidad y han provocado migraciones hacia otros territorios, entre ellos Maku, Masamana, Tekia y Venezuela.

Zairy Vélazquez, una de las descendientes del territorio, destacó la importancia de recuperar la memoria colectiva y las prácticas ancestrales para enfrentar el cambio climático. “Como mujeres, estamos reflexionando sobre la gestión del territorio desde nuestra identidad como Wayuu en este contexto de crisis climática. Para ello, necesitamos seguir escuchando a nuestras abuelas y abuelos, cuyos saberes han resistido por generaciones y representan una vida en armonía con la naturaleza”, expresó.
El primer día del encuentro incluyó un ejercicio de genograma que abarcó siete generaciones del linaje Ipuana. Esta actividad permitió a los participantes profundizar en el entendimiento de sus raíces familiares y de las relaciones con quienes comparten actualmente el territorio.

En la segunda jornada, se realizó un recorrido por los lugares históricos donde habitaron sus ancestros. Este recorrido facilitó la identificación de acciones específicas para abordar las necesidades más apremiantes, como la revitalización del idioma wayuunaiki y su papel en la construcción de resiliencia comunitaria.
Al finalizar el encuentro, se tomaron decisiones sobre un plan de acción que la familia implementará durante los próximos cinco años para rescatar y fortalecer las prácticas tradicionales de resiliencia frente al cambio climático.
Este proyecto cuenta con el respaldo del Foro Internacional de Mujeres Indígenas (FIMI), un aliado clave para visibilizar la situación del pueblo Wayuu y fortalecer su resistencia ante los efectos de la crisis climática.
