Varias viviendas quedaron destruidas y decenas de familias resultaron damnificadas.
El Movimiento Indígena Nación Wayuu denunció la grave situación que enfrenta la comunidad de Jaturruy, ubicada en el kilómetro 48 de la vía a Uribia, jurisdicción del municipio de Maicao, tras el devastador vendaval ocurrido en la tarde del sábado. El fenómeno natural, producto de un fuerte remolino seguido de intensas lluvias y ráfagas de viento, dejó alrededor de 10 viviendas destruidas y decenas de familias en condición de vulnerabilidad.
La comunidad, compuesta por 47 familias integradas por niños, jóvenes, adultos mayores y personas en condición de discapacidad, quedó expuesta a la intemperie tras la emergencia. Entre los damnificados se encuentra el niño Geiser Saith López Epinayu, de 3 años, quien sufrió golpes en la frente luego de quedar atrapado bajo los escombros.

Cabe destacar que las autoridades meteorológicas de La Guajira habían advertido sobre la presencia de lluvias acompañadas de fuertes vientos como efecto indirecto del huracán Erin, condiciones que, sumadas a otros factores meteorológicos, agravaron el impacto sobre esta comunidad indígena.
Ante esta situación, el Movimiento Indígena Nación Wayuu, que hizo presencia inmediata en la zona para atender a las familias afectadas y coordinar labores de ayuda, elevó una acción urgente de solicitud de atención e intervención inmediata del Estado colombiano. La organización hizo un llamado directo a la Presidencia de la República, a la Consejería Presidencial para los Derechos Humanos y a las instituciones competentes para que activen medidas inmediatas de protección y asistencia humanitaria.

Asimismo, la organización solicitó a la empresa Cerrejón para que, a través de su programa de responsabilidad social, activen las rutas de ayudas humanitarias y solidaridad para esta comunidad.
“Estamos acompañando a la comunidad de Jaturruy, que hoy lo perdió todo. Exigimos la presencia del Estado para garantizar atención médica, refugio, alimentos y medidas de protección a las familias afectadas”, señaló el director del Movimiento Indígena Nación Wayuu, José Silva Duarte.
El movimiento advirtió que la situación requiere respuestas rápidas y coordinadas, pues las familias se encuentran en alto riesgo al haber perdido sus viviendas y pertenencias en medio de las difíciles condiciones climáticas que atraviesa La Guajira.
