Tres periquitos y dos turpiales fueron incautados por la Policía Nacional en la ciudad de Riohacha, durante un operativo realizado en la calle 40 con carrera 6, y posteriormente entregados a Corpoguajira para su valoración y atención especializada.
Una vez recibidas, las aves quedaron bajo custodia del equipo técnico de la autoridad ambiental, que evaluará su estado de salud con el fin de iniciar el proceso correspondiente de recuperación, rehabilitación y eventual liberación en su hábitat natural.

Desde Corpoguajira se reiteró que el cautiverio afecta gravemente a las aves silvestres, ya que les genera altos niveles de estrés, debilitamiento físico y alteraciones en su comportamiento natural, disminuyendo sus posibilidades de supervivencia en libertad.
La entidad recordó además que la fauna silvestre no debe permanecer en cautiverio como mascota ni ser objeto de comercialización, prácticas que constituyen un delito ambiental sancionado por la legislación colombiana y que pueden acarrear consecuencias penales para los responsables.







