Este domingo 2 de marzo, Riohacha se vistió de gala para celebrar el tradicional Desfile de los Embarradores, uno de los eventos más emblemáticos del Carnaval de Riohacha. Esta festividad, que data de 1867, es reconocida como una de las más antiguas de América Latina.
Desde tempranas horas, miles de personas se congregaron en las principales calles de la ciudad para ser testigos de este majestuoso desfile. Las comparsas, llenas de color y alegría, recorrieron la avenida principal, mostrando la riqueza cultural de la región. Los Embarradores, homenajeados este año, destacaron con su tradicional atuendo cubierto de barro, simbolizando una práctica ancestral que ha sido transmitida de generación en generación.
El Desfile de los Embarradores no solo es una manifestación cultural, sino también un reflejo de la identidad riohachera. Este año, la festividad atrajo a turistas de diferentes partes del mundo, quienes quedaron maravillados con la autenticidad y el fervor de las celebraciones. La presencia de visitantes internacionales resalta la trascendencia global que ha alcanzado esta tradición única de Riohacha.
Uno de los aspectos más destacados de la jornada fue el comportamiento ejemplar de los asistentes. Las autoridades locales, en colaboración con la comunidad, implementaron medidas de seguridad que garantizaron el desarrollo pacífico del evento. El civismo y la responsabilidad de los ciudadanos permitieron que la fiesta transcurriera sin contratiempos, consolidando al Carnaval de Riohacha como un espacio de sana convivencia y disfrute colectivo.
La figura de los Embarradores, homenajeada este año, es emblemática en la cultura de Riohacha. Su tradición se remonta a 1867, cuando José Laborde, inspirado por celebraciones en Francia, introdujo esta práctica en la región. Desde entonces, los Embarradores se han convertido en un símbolo de resistencia y pertenencia cultural, siendo reconocidos a nivel nacional e internacional.