“La protección del Estado no puede convertirse en un mecanismo de vigilancia ni en un chantaje institucional”: parlamentario.
El senador Alfredo Deluque advirtió que en Colombia no existen garantías reales para la oposición, luego de semanas de denunciar públicamente que la Unidad Nacional de Protección (UNP) mantiene bajo su custodia información de geolocalización (GPS) de los congresistas.
Ante la falta de claridad, el senador radicó un derecho de petición solicitando detalles sobre la forma en que la UNP administra, custodia y elimina estos datos.
La respuesta de la entidad, según Deluque, resultó preocupante y absurda, pues confirma la desprotección y la vulnerabilidad de quienes reciben el servicio.
La UNP reconoce que la ubicación es un dato personal sensible, pero insiste en que el GPS es “solo técnico”. A pesar de ello, el senador expuso varios hallazgos graves: No existe consentimiento escrito de los protegidos para el uso de esta información, no hay auditorías externas que vigilen el manejo de los datos, no se informa con claridad cuánto tiempo se almacenan los registros ni cómo se eliminan y la entidad condiciona la protección, pues si un congresista se niega a la geolocalización, la UNP señala que simplemente no presta el servicio.
“La protección del Estado no puede convertirse en un mecanismo de vigilancia ni en un chantaje institucional. Este manejo de información pone en riesgo derechos fundamentales y deja en evidencia que la oposición no cuenta con garantías mínimas en Colombia”, afirmó el senador Deluque.
Finalmente, el congresista fue enfático en advertir que este tipo de prácticas abren la puerta al espionaje político, lo cual es inaceptable en una democracia y constituye un grave atentado contra la seguridad de los líderes de oposición en el país.