La Secretaría de Educación Departamental trabaja incansablemente por garantizar la calidad del servicio educativo en los doce municipios no certificados del departamento, apostándole al diálogo como herramienta fundamental para resolver los desafíos del sector.
En medio de un panorama complejo para la educación en La Guajira, la Secretaría de Educación Departamental, bajo el liderazgo de Carlos Andrés Duarte, secretario de Educación (e), ha reafirmado su compromiso con una gestión cercana, abierta al diálogo y centrada en el bienestar de la comunidad educativa.
El secretario (e) lideró recientemente varios espacios clave de diálogo con actores del sector educativo. Uno de ellos fue la reunión con el comité directivo de ASODEGUA, sindicato que agrupa a los docentes y prestadores del servicio educativo, en la cual se instaló una mesa permanente de diálogo como mecanismo para avanzar en la atención del pliego de peticiones presentado por el gremio. Durante el encuentro, se aclaró que el Departamento de La Guajira ha venido garantizando las condiciones necesarias para la prestación del servicio escolar, a través de grandes esfuerzos en áreas fundamentales como el Programa de Alimentación Escolar (PAE), el transporte escolar, la entrega de la canasta educativa y el mantenimiento del aseo en las instituciones. Estos logros, aunque retadores, reflejan el compromiso de esta administración con la educación como prioridad y su disposición constante al diálogo para seguir mejorando las condiciones del sistema educativo en el territorio.

En este sentido, también se llevaron a cabo jornadas de concertación en los municipios de Dibulla y Manaure, donde se venían presentando situaciones que afectaban la continuidad del servicio educativo.
Uno de ellos se relacionaba con la Institución Educativa Eusebio Septimio Mari, donde un grupo de padres de familia detuvo las actividades escolares debido a su inconformidad con las obras de remodelación que se adelantan, para esto la Secretaría de Educación Departamental convocó reuniones con la Secretaría de Educación Municipal, la Personería, y las Secretarías de Planeación y Obras, logrando establecer acuerdos que permitieron retomar la jornada escolar y dar continuidad a las obras.

Por otra parte, la comunidad educativa de la institución Etnoeducativa Rural, San Lorenzo de Shiruria por conflictos internos, impedía que los estudiantes se inscribieran a las Pruebas Saber. En este caso gracias a la intervención articulada de la Secretaría de Asuntos Indígenas, y los equipos de Calidad, Cobertura y Recursos Humanos de la Secretaría de Educación, se llegó a un acuerdo respetuoso de los usos y costumbres del pueblo Wayuu, garantizando así la normalización del servicio.
En Mingueo, corregimiento de Dibulla, se presentó un caso de inseguridad que generó la suspensión de clases. Padres de familia de la I.E. INETRAM interrumpieron el servicio educativo tras el hurto de 40 computadores. En respuesta, se trasladaron hasta la sede de la Secretaría de Educación Departamental, donde se realizó una mesa de trabajo con la Fiscalía, la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo, la Secretaría de Gobierno, la Policía Nacional y los funcionarios del sector educativo. Como resultado, se asignaron vigilantes a la institución, se reforzó la seguridad con el acompañamiento de la Policía y se acordó mantener una vigilancia comunitaria activa para prevenir nuevos incidentes.
Desde la Gobernación de La Guajira, se hace un llamado a toda la comunidad educativa a mantener abiertos los canales de diálogo, evitando las vías de hecho, para seguir construyendo soluciones de manera conjunta.
