Como parte de su compromiso con la cultura, la educación ambiental y la identidad territorial, La Guajira abrió oficialmente las puertas del Museo Itinerante Makuriwa con la exposición comunitaria PALAA, una muestra construida desde el diálogo entre ciencia, arte y comunidades locales para destacar la importancia del agua, los ecosistemas costeros y la memoria ancestral del pueblo guajiro.
La exposición, que estará disponible hasta este 24 de junio en el Centro Cultural de Riohacha, ofrece entrada libre a toda la ciudadanía, incluyendo instituciones educativas, organizaciones sociales, turistas y visitantes. Desde su apertura, el evento ha convocado a centenares de personas interesadas en explorar una propuesta educativa y artística con profundo arraigo en el territorio.

PALAA, palabra wayuunaiki que significa agua, es una invitación a recorrer de manera multisensorial una experiencia en la que se entrelazan la fotografía, la oralidad, los relatos de las comunidades, el arte contemporáneo y el conocimiento científico. La propuesta ha sido liderada por hombres y mujeres del territorio en articulación con el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (INVEMAR) y Corpoguajira, en un trabajo conjunto con la administración departamental.
“El Museo Makuriwa representa un esfuerzo colectivo por visibilizar la riqueza natural de nuestro departamento, pero también la sabiduría de nuestras comunidades para preservarla. Invitamos a toda la ciudadanía a vivir esta experiencia que nos conecta con nuestras raíces y nuestro futuro”, afirmó Rafael Zúñiga, director de Turismo de La Guajira.

Además de su valor artístico y científico, la exposición promueve el reconocimiento de la memoria territorial y el turismo cultural como herramientas para fortalecer el tejido social y conservar el patrimonio natural del departamento.
Desde la administración departamental se resaltó que esta iniciativa hace parte de un enfoque integral para construir una Guajira más consciente, sostenible e incluyente, en la que el desarrollo turístico, la cultura y la participación comunitaria avancen de la mano.
“Esta exposición es un ejemplo de cómo el territorio se convierte en protagonista de su propia transformación”, concluyeron los organizadores.
