Desafíos en el precio de los combustibles: controversia entre subsidios y realidades económicas en Colombia
El gobierno colombiano, ante la crisis en las finanzas públicas generada en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), tomó la decisión de eliminar los subsidios, lo que provocó un incremento en los precios de la gasolina en el país.
El ministro de Hacienda y Crédito Público, Ricardo Bonilla González, manifestó en una entrevista televisada que el precio de este combustible está atado al precio internacional del barril de petróleo; lo que significa que, si el precio internacional del barril de petróleo baja, el precio de la gasolina también disminuirá; y si el primero sube, el segundo también lo hará. Pero hasta ahora, la tendencia ha mostrado una baja en el precio internacional en esta unidad.
A pesar de las gestiones realizadas por el gobierno departamental, será muy difícil lograr mayores reducciones en el precio de los combustibles a nivel nacional, y por supuesto para el departamento de La Guajira, debido a la eliminación de la política de subsidios. Además, es importante considerar que el impuesto al carbono, creado mediante la Ley 1819 de 2016, será aplicable en 2025, como se puede apreciar en el siguiente cuadro:
Este impuesto es un gravamen que se aplica al contenido de carbono equivalente (CO2eq) de todos los combustibles, incluyendo derivados del petróleo, gas y combustibles sólidos. Abarca la venta dentro del territorio nacional, al retiro para consumo propio, y a la importación tanto para consumo propio como para venta. Actualmente, la tasa es de $25.799,56 pesos por tonelada de CO2eq. La reforma tributaria propuesta para 2025 prevé un incremento gradual de esta tarifa hasta $75.000 pesos por tonelada, lo que incrementaría nuevamente el precio de los combustibles.
Ante las declaraciones del secretario de gobierno departamental, Misael Velásquez Granadillo, donde asegura que “No queremos regresar a las carreteras de la muerte ni al negocio del contrabando. Nuestro objetivo es dinamizar la economía con precios justos que permitan mejores oportunidades”, es imperativo abordar los problemas estructurales de la sociedad guajira, ya que todos ellos, económicos y sociales, se presentan de manera simultánea.
Un ejemplo de esto son los resultados obtenidos por el departamento de La Guajira en las estadísticas recientes publicadas por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), los cuales indican que la ciudad con mayor inflación de Colombia es Riohacha (7,91%). Además, el desempleo (16,6%) y la informalidad (61,9%) ocupan el segundo y tercer puesto, respectivamente.
Por último, en manos del departamento de La Guajira y sus municipios está la solución, que debe partir de un estudio económico que permita una reducción en el precio de los combustibles. Esto mejoraría las condiciones de los transportadores y de la población en general, sin que dichas acciones impacten negativamente los marcos fiscales de mediano plazo de las entidades territoriales. Además, esta medida podría ayudar a disminuir la informalidad, mejorar las condiciones de empleo y aumentar la capacidad adquisitiva de la población guajira.