Una completa tragedia vivió en los últimos días una familia wayúu. Todo inició el pasado domingo 8 de octubre, cuando un hombre que se movilizaba en su motocicleta, chocó de frente con un taxi y ambos se incendiaron, muriendo este en el lugar de los hechos y siendo recogido posteriormente por usos y costumbres por sus familiares.
Al día siguiente, el pasado lunes 9 de octubre, unos familiares se dirigían desde Riohacha a Maicao para su velorio; pero en el camino, exactamente después del peaje, en el km 46, fueron víctimas de una mortal táctica empleada por delincuentes.
Ya anochecía, eran aproximadamente las 6:00 de la tarde, cuando Norelis Beatríz Ferrer Gonzalez, acompañada de un familiar que conducía la motocicleta y su pequeño hijo Diosjailer Emiro Lopez Ferrer, de 3 años, se chocaron contra con un burro muerto que yacía sobre el pavimento.
Al momento del impacto, todos reciben golpes de consideración, pero quien llevó la peor parte fue el pequeño de 3 años que cayó sobre un objeto contundente que le hizo una herida abierta en la cabeza, lo que le produjo la muerte instantáneamente .
Luego del accidente, unos hombres de características wayúu salieron de la maleza con el fin de atracarlos, pero cuando vieron la escena del niño muerto en el pavimento, retrocedieron y huyeron del lugar.
Los familiares que viajaban en moto, indicaron que durante todo el tramo no vieron controles policiales y tampoco recibieron atención médica ni asistencia rápida. Denunciaron la ausencia de las autoridades y hoy, sufren la ausencia de sus dos seres queridos, muertos en la misma vía.
Creen que si hubieran mas controles en las vías estos hechos de inseguridad y accidentes pudieran evitarse.
