Cuando había una pelea, los que se encontraban participando vieron a los soldados y de inmediato huyeron dejando un arma de fuego abandonada.
El patrullaje lo realizó un pelotón del Grupo de Caballería Mecanizado Juan José Rondón, que efectuaban una vigilancia para establecer control territorial.
Los militares estaban haciendo la ronda en el área rural del corregimiento Carretalito, en el municipio Barrancas, específicamente en la vereda Barrancón.
Allí fueron alertados por los residentes de unas fincas cercanas, que había una riña y los uniformados se dirigieron hasta el sitio donde les informaron.
En ese momento alcanza a observar a un tumulto de gente y siguieron hacia ellos, pero algunos de los presentes emprendieron la huida en veloz carrera.
Al dispersarse estas personas encontraron en el suelo una escopeta, doble cañón, que fue dejada tirada. El arma de fuego fue dejada a disposición de la autoridad competente.