Más de 160 personas se dieron cita en los encuentros gastronómicos que se llevaron a cabo en la sede Comercio y Servicios y en el Centro Agroempresarial y Acuícola, en Fonseca.
Malangada, albóndigas de Macabí, ajiaco de cecina y Chel, o entremés de cabeza de cerdo: los deliciosos platos tradicionales que los asistentes vieron preparar en vivo y en directo en el evento La cocina tradicional guajira como factor de competitividad en el turismo.
La transferencia de conocimientos contó con el apoyo de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica – ACODRES, dirigida a emprendedores, gerentes, instructores, chefs, auxiliares de cocina, aprendices, profesionales y público en general interesado en cualificar y mejorar sus competencias en la cocina tradicional guajira.
En el encuentro se contó con la participación de expertos que compartieron experiencias y conocimientos relacionados con la cocina tradicional guajira. Weildler Guerra Curvelo, antropólogo e historiador guajiro, expuso a los asistentes el significado e historia de variadas preparaciones tradicionales y ancestrales.
“El esfuerzo que se hizo hoy tiene que ver con una de las cocinas más heterogéneas: la cocina guajira. Una cocina milenaria que tiene una base indígena e influencias africanas, europeas y asiáticas y que se manifiesta en una gran variedad de platos vinculados al mar o a la tierra, que tienen un significado simbólico y ontológico muy profundo. Son platos cargados de historias”, expresa Weildler Guerra.
Por su parte, Ricardo Malagón, chef e instructor del SENA Regional Distrito Capital, y Robinson Sanabria, instructor SENA Guajira, presentaron sus ponencias relacionadas con la gastronomía como instrumento para potenciar el turismo y resaltar la identidad cultural de La Guajira.
“Podemos aprovechar los conocimientos e investigaciones para hacerlos nuestros y potenciar nuestra riqueza gastronómica. Estoy seguro de que, si logramos sinergia desde todos los sectores, el futuro de la cocina colombiana será mucho mayor en reconocimientos a nivel mundial”, afirma Ricardo Malagón.
Con este tipo de encuentros, el SENA sigue conectando con el sector empresarial como aporte al desarrollo económico de la región, en especial con la formación a las nuevas generaciones, espacios para transmitir el patrimonio cultural y este sea llevado a la mesa de los visitantes que llegan a la península de La Guajira.