En una emotiva entrevista conducida por la Psicologa Yusi Soto, la Señorita Guajira, Lilia Ballesteros Egurrola, comparte su historia de transformación personal y profesional: el paso de ejercer la medicina al representar con orgullo a su departamento en el Concurso Nacional de Belleza.
Durante la conversación, Lilia reflexiona sobre las problemáticas que afectan a la niñez y la juventud guajira, como el bullying en redes sociales, y la importancia de aprender a gestionar las emociones frente a la crítica y la exposición pública. Desde su experiencia como médica, invita a los jóvenes a desarrollar empatía, fortaleza emocional y respeto hacia los demás, reconociendo que el bienestar mental y social son pilares fundamentales del desarrollo humano.
Uno de los momentos más profundos de la entrevista llega cuando Lilia habla del duelo por la pérdida de su madre, ocurrido hace dos años. Con serenidad y madurez, comparte cómo ese proceso fortaleció su espíritu y le dio sentido a su vocación de servicio. “Mi madre me enseñó a ser fuerte, a creer en los demás y a nunca perder la fe”, afirma con emoción.
Durante su año rural como médica en el municipio de Manaure, La Guajira, Lilia tuvo la oportunidad de conocer de cerca las problemáticas sociales y de salud que enfrentan las comunidades indígenas wayuu. Esa experiencia marcó profundamente su visión del territorio y reforzó su compromiso con las causas sociales.

“Fue una experiencia significativa, entender desde dentro las realidades que viven nuestras comunidades. La belleza y la salud son importantes, pero la transformación social no es la única solución: necesitamos educación, empatía y presencia constante del Estado”, expresó.
Además, hace un llamado a sus colegas médicos a ejercer con más humanidad, a comunicarse mejor con los pacientes y acompañar no solo los procesos clínicos, sino también los emocionales de las familias.
Con visión de futuro, Lilia comparte su deseo de especializarse en dermatología, no solo por los temas estéticos, sino porque —como explica— “la piel es el órgano más grande del cuerpo y el primero que refleja lo que sucede en nuestro interior. Cuidarla es cuidar la salud integral de las personas.”
Su historia también está inspirada en el ejemplo familiar. Desde pequeña, Lilia creció admirando a su tía María Teresa Egurrola, Señorita Colombia 1988, quien le enseñó que la belleza puede ser un vehículo para el liderazgo, la educación y el compromiso social. Ese legado la impulsa hoy a ser una voz potente para La Guajira y para toda Colombia, llevando un mensaje de esperanza, resiliencia y servicio.

“Representar a La Guajira es servir con amor, inspirar a otros y recordar que el verdadero brillo está en el alma”, expresó Lilia.
El espacio “Voces que reinan, una corona más humana”, dirigido por Yusi Soto, destaca está vez una historia de una mujere guajira que, como Lilia, unen su sensibilidad humana con su liderazgo social, construyendo un mensaje de transformación, orgullo y propósito.
Gracias por ver el video y acompañar este testimonio que refleja el espíritu de superación, fortaleza y liderazgo de la mujer guajira.